La final del concurso de relatos de Cadena Ser del año 2010, a principios del mes de julio (que nos obligó a reducir de cinco a cuatro días nuestra estancia en Roma, adelantar el vuelo de regreso… y ¡sorpresa! nos encontramos al Niki Acusica Joaquin Rodríguez pilotando el avión) tuvo un efecto colateral muy importante, que fue el de conocer a los demás finalistas y compartir el aperitivo después. Pero no todo terminó ahí. Con la mayoría he mantenido un contacto bien a través de los blogs (Agustín Martínez Valderrama, Ana Martínez, Alberto Corujo), bien a través del facebook (Almudena Sánchez, Miguel Torija), de dos no he vuelto a saber (Ernesto Girondo y Javier Regalado), pero sobre todo he estrechado lazos (y cadenas) con Isabel González González y Rosana Alonso, dos escritoras “casi tan salvajes” como yo.