
Cuando inauguré Cartas Sin Sellos abrí dos secciones dedicadas a las consultas psicológicas: una para adultos y otra para adolescentes. Eran gratuitas, y publicaba esas cartas sin faltas de ortografía (siempre cuidé los textos que aparecían en mi web). También ofrecía una respuesta privada a módico precio, pero ya hace casi diez años descubrí que en internet casi nadie quiere pagar. Estuve dos años respondiendo cartas, hasta que llegué a 444 consultas atendidas de adultos y 400 de adolescentes, y ahí interrumpí el servicio. Siempre me ha gustado hacer consultorios, pero inspirándome en un estilo particular, y en mi adolescencia seguía el consultorio de la escritora Barbara Alberti en la revista italiana "Amica". En prensa española he hecho el consultorio que tuvo la revista "Glamour", y antes el de "Saber Vivir", ambas publicaciones bajo la dirección de Alicia Parro.
Volviendo a Cartas Sin Sellos, me encantaba contestar a los adolescentes, se volcaron con la web, escribían y escribían, y eran sinceros y agradecidos. De todo aquello he recogido una selección de cien consultas, que reflejan los temas que surgieron asi como el estilo con que escribían.