Nothing lasts really. Neither happiness nor despair. Not even life lasts very long. (Brief Encounter, 1945)

sábado, 23 de abril de 2011

Falsas promesas


Todos apretujados en aquel enorme congelador y sin parar de llorar. Quién lo hubiese imaginado (...)
Guardo el relato para futuros usos, gracias a quienes lo habéis comentado



Beatriz Alonso Aranzábal

Nuevo intento en el concurso de Relatos en cadena, lo comparto porque agradezco todos los comentarios y sugerencias. La frase inicial era "Todos apretujados en aquel enorme congelador" y como siempre, 100 palabras como máximo.

13 comentarios:

Odys 2.0 dijo...

Y tanto que lo picaron, nunca mejor dicho...

Espero que estés disfrutando de un merecido descanso semanasantil.

Besos.

Beatriz AA dijo...

Gracias Odys, aquí estaba mi homenaje a Pinocho, cuando los niños se convierten en asnos por ser tan burros...

Anónimo dijo...

Por nada Pinocho es italiano y mira tu en que agua nos encontramos los itàlicos por creer en manantiales milagrosos.

Marco Ongania

Pablo Gonz dijo...

Me gustó, Beatriz. Todo lo que sea tirar piedras contra la corrupción del sistema político (y el actual sistema electoral es corrupto hasta la náusea) me parece un acto artístico muy necesario.
Abrazos de fuerza,
PABLO GONZ

Pablo Garcinuño dijo...

Pues sí, una misma frase y dos ideas relacionadas con las elecciones. Una suerte descubrir este blog.

Beatriz AA dijo...

Bel messaggio, grazie Marco!

Y un saludo especial a ambos Pablos, gracias por caer por aquí.

En este enorme congelador.

¿Seremos varitas?

puri.menaya dijo...

A mí también me recordó a Pinocho tu cuento, pero la realidad es así, tantas cosas prometen los políticos para que los votemos...
un abrazo

Anita Dinamita dijo...

Me encanta la idea!!! A muchos nos tratan de pescar así, como pinochos o atunes, esperemos que esta vez no lo consigan.
Un abrazo

Beatriz AA dijo...

Gracias Puri, Ana, bienvenidas, y hasta pronto ;-)

Ibán dijo...

El anzuelo nos lo hemos tragado todos y bien tragado.

Beatriz AA dijo...

WeLLcomE Iban a esta enorme red... de pececillos

Gemma dijo...

La vida está llena de sorpresas. Como descubrir, de pronto, que tienes un abuelo atún enorme y cabal... :-)
Un abrazo

Beatriz AA dijo...

Una gran alegría saludarte, Gemma