Nothing lasts really. Neither happiness nor despair. Not even life lasts very long. (Brief Encounter, 1945)

martes, 9 de noviembre de 2010

Pesada

Hablaba tanto por los codos que tuve que pararle los pies.

B.A.A.

9 comentarios:

Manu Espada dijo...

Este hiperbreve me ha hecho perder la cabeza.

Maite dijo...

Es un hiperbreve circular, porque tras terminarlo, vuelves a leer el título y te hace esbozar una sonrisa.
Un abrazo

David Moreno dijo...

Original. Me gustó. Un saludo indio

AGUS dijo...

Je, je, la traba se me lengua.

Un abrazo.

la mordaza dijo...

Los hay que no callan ni muertos. !Sálvese quien pueda!

Pablo Gonz dijo...

Ojo con lo que cuentas.
Abrazos,
PABLO GONZ

Beatriz AA dijo...

Gracias por hacerme sonreir varias veces esta mañana.

Esta frase la escribí hace unos años refiriendome a una paciente... y cuando me di cuenta de lo que había puesto me reí.

Ahora me ha ocurrido escribiendo un email. Mañana lo cuento.

Propílogo dijo...

Cuenta, cuenta. No hay nada como dar ruenga sienta a la linda.
Gabriel

R.A. dijo...

Pues me ha recordado a esos micros de Max Aub de Crímenes ejemplares:

Hablaba y hablaba

Hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba. Y venga hablar. Yo soy una mujer de mi casa. Pero aquella criada gorda no hacía más que hablar, y hablar, y hablar. Estuviera yo donde estuviera, venía y empezaba a hablar. Hablaba de todo y de cualquier cosa, lo mismo le daba. ¿Despedirla por eso? Hubiera tenido que pagarle sus tres meses. Además hubiese sido muy capaz de echarme mal de ojo. Hasta en el baño: que si esto, que si aquello, que si lo de más allá. Le metí la toalla en la boca para que se callara. No murió de eso, sino de no hablar: se le reventaron las palabras por dentro.
Son microrrelatos en los que se van justificando asesinatos por los motivos más variados y surrealistas.
Menos mal que tú no mataste a la paciente :DDDD

Kisses
xxxxx