Pues me ha recordado a esos micros de Max Aub de Crímenes ejemplares:
Hablaba y hablaba
Hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba. Y venga hablar. Yo soy una mujer de mi casa. Pero aquella criada gorda no hacía más que hablar, y hablar, y hablar. Estuviera yo donde estuviera, venía y empezaba a hablar. Hablaba de todo y de cualquier cosa, lo mismo le daba. ¿Despedirla por eso? Hubiera tenido que pagarle sus tres meses. Además hubiese sido muy capaz de echarme mal de ojo. Hasta en el baño: que si esto, que si aquello, que si lo de más allá. Le metí la toalla en la boca para que se callara. No murió de eso, sino de no hablar: se le reventaron las palabras por dentro. Son microrrelatos en los que se van justificando asesinatos por los motivos más variados y surrealistas. Menos mal que tú no mataste a la paciente :DDDD
9 comentarios:
Este hiperbreve me ha hecho perder la cabeza.
Es un hiperbreve circular, porque tras terminarlo, vuelves a leer el título y te hace esbozar una sonrisa.
Un abrazo
Original. Me gustó. Un saludo indio
Je, je, la traba se me lengua.
Un abrazo.
Los hay que no callan ni muertos. !Sálvese quien pueda!
Ojo con lo que cuentas.
Abrazos,
PABLO GONZ
Gracias por hacerme sonreir varias veces esta mañana.
Esta frase la escribí hace unos años refiriendome a una paciente... y cuando me di cuenta de lo que había puesto me reí.
Ahora me ha ocurrido escribiendo un email. Mañana lo cuento.
Cuenta, cuenta. No hay nada como dar ruenga sienta a la linda.
Gabriel
Pues me ha recordado a esos micros de Max Aub de Crímenes ejemplares:
Hablaba y hablaba
Hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba. Y venga hablar. Yo soy una mujer de mi casa. Pero aquella criada gorda no hacía más que hablar, y hablar, y hablar. Estuviera yo donde estuviera, venía y empezaba a hablar. Hablaba de todo y de cualquier cosa, lo mismo le daba. ¿Despedirla por eso? Hubiera tenido que pagarle sus tres meses. Además hubiese sido muy capaz de echarme mal de ojo. Hasta en el baño: que si esto, que si aquello, que si lo de más allá. Le metí la toalla en la boca para que se callara. No murió de eso, sino de no hablar: se le reventaron las palabras por dentro.
Son microrrelatos en los que se van justificando asesinatos por los motivos más variados y surrealistas.
Menos mal que tú no mataste a la paciente :DDDD
Kisses
xxxxx
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