Nothing lasts really. Neither happiness nor despair. Not even life lasts very long. (Brief Encounter, 1945)

domingo, 20 de noviembre de 2011

El micro de oro

Una pequeña broma que mandé a un concurso el mes pasado, en la que incumplo la norma autoimpuesta de no evocar a Monterroso. En fin, para eso estamos, para hacer lo que nos proponíamos no hacer.

EL MICRO DE ORO

Buscó inútilmente la fórmula para... (guardo el relato para futuros usos, gracias)
Beatriz Alonso Aranzábal


8 comentarios:

Puck dijo...

jajajaja ¿la rana todavía estaba allí? jajajaja
saludillos gigantes como un dinosaurio

Susana Camps dijo...

Es que hay calles que es imposible rodear.
Abrazos.

Beatriz AA dijo...

Puck, puede que fuera la rana, creo que tienes unas charca llena... ;-)

Susana, me gusta tu comentario, bso

Anónimo dijo...

...Y quedó atrapado en un bucle temporal del que solo lo sacó la vejez y la muerte.Un saludo.

Beatriz AA dijo...

Hola Lázaro, "atrapado por el bucle", je je, suena a peli de terror, un abrazo

Ana dijo...

..acariciaba un huevo dorado, preñado de palabras.

Pablo Gonz dijo...

Bastante con que el propio Monterroso esté todavía ahí. Aplaudo tus normas y la elegancia con la que te las saltas.
Abrazos fuertes,
P

Beatriz AA dijo...

Monterroso escribió el micro de oro sin saberlo, y seguimos sin saberlo. Te devuelvo los abrazos Pablo, con creces.

Por lo menos no mató a la gallina, para poder incubar "huevos dorados preñados de palabras" (gracias Ana, un beso).